Rihanna,
cantante originaria de Barbados, volvió a llamar la atención gracias a unas
fotos en las que se ve en pleno festejo al acudir al Festival de Coachella.
En
su cuenta de Instagram, la intérprete subió una imagen en la que aparece
sentada en los hombros de uno de sus guardaespaldas, pero no es ésa la
fotografía que ha escandalizado, sino otra en la que se ve con un
"sospechoso" polvo blanco.
La
mencionada imagen muestra la cabeza rapada del guardaespaldas sobre la que
Rihanna manipula un polvo blanco, que de inmediato fue identificado por algunos
cibernautas como cocaína.
Aunque
la cantante ha escrito en su Twitter "estoy loca y no pretendo ser nada
más", algunos critican su actitud por la influencia que pudiera
tener entre sus seguidores.
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